domingo, octubre 28, 2012

Sin grandes logros, pero con un listón

Luego de su primera gira internacional como presidente electo por América Latina, Peña Nieto visitó a los cuatro principales socios comerciales de México en Europa: Alemania, España, Francia y Gran Bretaña
 
Primero fue la foto. La pareja bajó de las escalinatas del avión presidencial que les prestó el todavía jefe de estado Felipe Calderón con un aire que algunos compararon, no sin cierta sorna, al de John F. Kennedy y Jackie.
Y es que el parecido entre Kennedy y Peña Nieto se limita al físico: ambos atractivos, mismo copete y sonrisa similar. Pero aquel dominio escénico que el joven Camelot estadounidense tenía, brilla por su ausencia en el priista de nuevo cuño. Por lo menos hasta ahora.
Quedó claro que Peña Nieto ya ubicó su tema de promoción internacional: la modernización de Petróleos Mexicanos
No se esperaban grandes noticias, pero hubo al menos una sorpresa: en la relación con Francia todo indica que el tema de Florence Cassez pasará a segundo plano
Y “La Gaviota” en realidad se parece más a Marilyn Monroe que a Jackie, aunque en esta imagen internacional por la que será recordada por muchos, luce seria, sobria y hasta recatada. Del brazo de su esposo y en un segundo plano.
Así pisa la joven pareja el Viejo Continente: adustos, descansados y bien maquillados. Ataviados ambos con clásicos abrigos negros, la foto es más digna de las más cotizadas revistas del jet set internacional que del The Economist.
Pero es la primera imagen de una gira diplomática que buscaba promover, o empezar a estampar internacionalmente, el sello del nuevo PRI en un continente que recuerda al viejo PRI con desconfianza.
Bajaba la pareja en el aeropuerto de Berlín. La primera escala del segundo viaje internacional le tocó a la capital del país de la Dama de Hierro del Siglo 21, la canciller Angela Merkel. El tema con su futura colega: energías renovables.
Fue en Francia, su última parada, donde saltó la sorpresa. Todo indica que ahí EPN se apuntó su primer éxito diplomático antes de tomar posesión. El presidente electo y el mandatario francés François Hollande habrían pactado dejar el caso de Florence Cassez, sentenciada a 60 años de prisión por secuestro, en manos del Poder Judicial y retomar la cordial relación entre ambas naciones.
¿Qué buscaba EPN en Europa? La misión de la gira del priista: “recuperar el liderazgo” del país en regiones que su equipo de transición considera “promotoras de un gran desarrollo para México”.
EPN quiso promover la idea que a su gobierno le interesa insertar a México en la economía global. 
Ser un actor internacional de peso. Recuperar su presencia en el concierto de naciones. Que ya no se hable de narcotráfico ni de corrupción...
Además, por supuesto, buscó llegar a algunos acuerdos con sus futuros colegas en los cuatro países –España, Alemania, Francia y Reino Unido. 
Pemex: el gran tema
Eso sí. Quedó claro que ya ubicó su gran tema de promoción, aquel que busca ser su carta de presentación internacional. Empezó en Brasil. Siguió en Alemania y continuó en España.
Se trata de la modernización de Petróleros Mexicanos, que fue, y seguirá siendo, su gran apoyo diplomático hacia afuera. El que le permite presentarse como un líder moderno; la herramienta con la que busca abrir un abanico de posibilidades fuera del ámbito nacionalista de sus antecesores de partido.
Habrá que ver hasta qué punto la realidad de la petrolera que recibe se lo permitirá.
Por lo pronto, buscó convencer a empresarios alemanes y españoles que, bajo su gobierno, México será una potencia energética; que abrirá la exploración, explotación y refinación a la empresa privada.
Next stop: Estados Unidos, cuando ya esté claro quién será el próximo presidente en el vecino país del Norte.
Lo que no está confirmado es cuándo viajará a Canadá, el tercer socio del Tratado de Libre Comercio de América del Norte; el país despreciado por el gobierno panista de su antecesor, en opinion de la ex canciller Rosario Green.
Y es que la gira europea fue el segundo reto diplomático de Peña Nieto. El primero fue en América Latina y el balance fue mixto. En el viaje europeo, se llevó un listón en Francia.
Está por verse si la gira tuvo resultados concretos, en pesos y centavos, más allá de lo diplomático y mediático.
Alemania: La energía renovable
El manejo de las energías renovables con Alemania, donde el país germano es líder, fue el gran tema en la reunión con la canciller Angela Merkel, según fuentes oficiales.
Tras un encuentro con la gobernante germana, Peña Nieto reconoció que México necesita ampliar su participación en esta materia, y se pronunció por alentar el libre comercio a fin de que haga posible la presencia de productos mexicanos en otros países.
EPN habló de su decisión de impulsar la competitividad y el crecimiento económico para la generación de más empleos en el país, así como “el interés de impulsar energías renovables que sean respetuosas del medio ambiente”. Expertos opinan que Alemania, junto con Gran Bretaña, son los países con mayor potencial para reforzar el comercio bilateral con México.
España: Una mano amiga
La segunda parada de EPN fue España, donde dejó un mensaje de solidaridad ante la grave crisis económica de la península asegurándole al presidente de gobierno Mariano Rajoy que PEMEX continuará con la construcción de dos hoteles flotantes.
Un despacho de la agencia oficial Notimex, informó que EPN respaldó los contratos de Pemex con astilleros de Galicia para la construcción de los “floteles”, pues se trata de una operación que significará “ganar-ganar” para ambos.
“Mi gobierno habrá de continuar con las gestiones iniciadas por Pemex y los astilleros de Galicia para los barcos-hoteles que se están por construir”, afirmó Peña Nieto, además de sostener que es algo que la empresa paraestatal mexicana está necesitando “creo que el acuerdo llevado a cabo genera condiciones favorables en un ambiente de ganar-ganar”.
Reino Unido: Reforma tributaria y educación
En Londres, la tercera ciudad visitada durante la gira de 10 días, EPN habló de la reforma tributaria con empresarios. En la reunión de casi una hora con el primer ministro David Cameron, no hubo grandes noticias.
En el twitter, su mano derecha, Luis Videgaray, anunció: “Muy buena conversación entre @EPN y el Primer Ministro británico David Cameron”.
Peña Nieto aseguró que su gobierno “tendrá como propósito incrementar las ventajas comparativas para las inversiones y para hacer de México un país más competitivo”, según Notimex. En un mensaje ante medios de comunicación en la embajada mexicana, reiteró que su gobierno buscará fortalecer relaciones con Gran Bretaña, país que destaca por la mayor inversión acumulada en México de Europa, después de España.
Francia: Last stop, primer éxito
El primer triunfo de EPN fue convencer al gobierno francés que la justicia mexicana será aplicada, que Florence Cassez deberá cumplir con la condena impuesta de 60 años y que el tema pasará a segundo plano en la relación bilateral.
El presidente francés Francois Hollande acordó con su futuro colega mexicano “impulsar y reactivar” las relaciones entre sus dos países, según la agencia oficial de noticias Notimex.
“Hemos reafirmado nuestra amistad, nuestra voluntad nada más jurar su cargo de impulsar y reactivar las relaciones franco-mexicanas”, declaró Hollande según la fuente.
El presidente galo reconoció que la relación entre ambos países “tuvo altibajos” y señaló que “en el tema cultural nuestras relaciones fueron marcadas por la anulación del año de México en Francia. Peña Nieto anunció la creación de un consejo franco-mexicano de alto nivel con el presidente galo.http://www.reporteindigo.com/reporte/mexico/sin-grandes-logros-pero-con-un-liston

El último pas de deux

#Indigósfera


El último pas de deux
Falta poco para el Super Tuesday del próximo 6 de noviembre. Muchos asumen que ya ganó Obama, especialmente después de escuchar a un confuso e incoherente Romney en el tercer y último debate presidencial.
 

No olvidemos que hay un empate técnico entre ambos candidatos en voto directo popular y nueve estados indecisos (Ohio, Virginia, Florida, Nevada, Carolina del Norte, Wisconsin, Nueva Hampshire, Iowa y Colorado) que representan 110 votos del Colegio Electoral.
Y es que el tema del último encuentro entre ambos fue política exterior, no precisamente un asunto que aporte o reste votos cruciales en Estados Unidos. Pocos conocen, y a menos aún les importa, lo que pasa allende sus fronteras mientras no sea terrorismo en casa, a la Bin Laden.
Hay excepciones. Si alguien se interesa por la política exterior de Estados Unidos (sin contar a la millonaria industria armamentista por supuesto, que vota por la guerra) son quienes opinan que Obama ha mejorado la desastrosa imagen internacional que le dejó Bush de recuerdo. Esos son incondicionales del presidente. Su voto duro.
Pero hay que decirlo: debatir sobre política exterior siempre ha sido más fácil para un presidente. Después de todo, él recibe información de inteligencia precisa y clave de generales y diplomáticos, todos los días.
Y el lunes pasado en la Universidad de Lynn en Boca Ratón, en el Estado clave de Florida, Obama utilizó esa carta a su favor:
“Sé que usted no ha estado en condiciones de operar la política exterior”, dijo condescendiente. “Pero cada vez que ha dado una opinión, se ha equivocado”.
Si no siempre equivocado, algunas veces fue contradictorio. En todo caso, fue obvio que el ex gobernador de Massachusetts se sentía más a gusto hablando de educación o economía, aunque también tuvo acceso a reportes de inteligencia sobre política exterior desde el mes pasado.
Claro, no es lo mismo leerlo que vivirlo. Y se notó. La noche del lunes pasado, el republicano debatió sobre Irak, Siria, Afganistán, Irán, Medio Oriente como si estuviera tratando de recordar lo aprendido de memoria.
Pero el tema no es quien sea el mejor candidato para ocupar la Casa Blanca. Eso no se decidió en el último debate. Ese caldo se cuece aparte.
El encuentro arrojó otro tipo de luces. Más reveladoras quizá.
1. Obama y Romney coinciden en que “América” (léase Estados Unidos de América del Norte) es “una nación indispensable” (Obama) o, dicho por su rival republicano, “la esperanza del mundo”.
2. Al moderador a veces le costaba que ambos se ciñeran al tema propuesto. Un botón de muestra: “Permítanme volver a la política exterior. ¿Puedo volver a la política exterior?”, dijo Bob Schieffer en por lo menos una ocasión.
3. El debate dejó los sellos visuales de ambos candidatos. De Obama, recordaremos su estampa y su mirada intensa. Del republicano, su robótica sonrisa congelada.
4. América Latina solo fue mencionada en una ocasión. Fue Romney el responsable. “La oportunidad para nosotros es América Latina, no China”, dijo el republicano en un fallido intento de atacar la posición de Obama sobre China.
5. ¿Y México, el principal socio comercial y vecino que sufre las consecuencias de una guerra inventada por Calderón pero alimentada por el consumo en Estados Unidos? Bien gracias.

Las frases de los debates en Estados Unidos

INDIGÓSFERA
 
Un Obama imperial y un Romney robótico aparecieron en escena ante 80 votantes indecisos de los que solo 11 formularon una pregunta en el encuentro moderado estupendamente por la periodista de CNN, Candy Crowley.
Es cierto que las primeras encuestas sobre el segundo debate presidencial dieron como ganador a Obama, pero por un estrecho margen sobre Romney, quien también logró asestar duros golpes al presidente.
Un poco arrogantes ambos pero sin duda Obama comunicó mejor, aunque nunca como en aquellos legendarios días de su primera campaña electoral, cuando su solo caminar inspiraba sueños y pasiones.
Y es que el ejercicio del poder siempre afecta al habitante de la Casa Blanca. Como al de Los Pinos o al del Palacio del Eliseo o a la actual de la Casa Rosada. Nadie es inmune a ese deterioro.
En realidad, el ganador fue el debate mismo. Es de lo mejor que tiene el sistema electoral del vecino país desde 1960, cuando se enfrentaron un vigoroso Kennedy y un ojeroso Nixon. Lo vieron 70 millones de almas. Ganó Camelot.
Y hay frases que eternizarán este show business político que los estadounidenses hacen tan bien.
En 1976 una de ellas pasó a la historia por desafortunada: “No hay dominación de la Unión Soviética en el este de Europa”. Le correspondió a Gerald Ford en su debate con Jimmy Carter. Perdió las elecciones.
Y en 1984, la de Walter Mondale frente a Ronald Reagan a propósito de la edad del segundo. Elegante, el ex actor contestó: “No voy a hacer de mi edad un tema de campaña ni tampoco voy a explotar la juventud e inexperiencia de mi adversario”. Ganó Reagan.
A Dukakis, un opositor de la pena de muerte, se le preguntó en el debate de 1988 contra George Bush padre si cambiaría de opinión si su esposa Kitty fuera violada y asesinada. Dukakis, en vez de atacar la cuestión, respondió: “No, no creo. Me opondré a la pena de muerte toda mi vida”. Perdió Dukakis.
Y la respuesta contundente de Ross Perot a George Bush en 1992. Bush intentó atacar a Perot en el flanco de la experiencia y éste le devolvió la ofensiva con una frase demoledora: “Experiencia en endeudar al país en cuatro mil millones de dólares seguro que no tengo”. Pero no ganó Perot.
En el debate del martes pasado, la frase más significativa podría ser la de Obama, cuando dijo “mi plan de pensiones es mucho menor que el suyo”.
Pero que el debate lo ganó, no me cabe ninguna duda.
Fueron 90 minutos de apasionante espectáculo televisivo visto por millones y al mismo tiempo, un importante ejercicio democrático; este sí un modelo digno de exportación, no como los malls y los casinos.
A tres semanas de las elecciones y con tres por ciento de indecisos, fue el principal evento político en la historia de las redes sociales –generó 12.24 millones de comentarios en Twitter y Facebook– y el tercero entre los principales eventos de cualquier tipo, superado por los Grammy y los MTV Video Music Awards.
Si alguien perdió, fue México. El tema migratorio, aunque lo ganó Obama, lo perdió este país porque nadie parece tener la voluntad política para resolverlo. Especialmente en lo que respecta a la operación “Rápido y Furioso”.
Aunque es cierto que el presidente fue brillante cuando tocó el tema de la inmigración, que por primera vez aparece en un debate de esta campaña, quedó claro que no será una prioridad para el próximo gobierno, sea del republicano o del demócrata.

Con Chávez en campaña

#Indigósfera


http://www.reporteindigo.com/reporte/mexico/con-chavez-en-campana

No estaba prevista una conferencia de prensa. Hugo Chávez llegó a una concentración en Guarenas, barrio marginal de las afueras de Caracas. Allí estaban los periodistas. Él se acercó y aceptó tres preguntas: dos de medios afines al chavismo y una, de la corresponsal extranjera con acento español, quien aventuró la pregunta que nadie se atrevía a hacer.
 
“Presidente, ¿qué pasará si usted pierde la elección?”, le preguntó Elisabet Sabartés, la enviada del diario La Vanguardia.
“Nosotros no perdemos. Seguro. Pero mira, más seguro que el satélite Miranda está allá a 600 kilómetros. Es imposible que perdamos. Ese es nuestro destino: la victoria”, contestó el todavía presidente de Venezuela. Acto seguido, soltó una “perorata sobre Simón Bolívar en la batalla final contra los españoles”, cuenta Sabartés.
Y es que todo indica que la posibilidad de perder las elecciones del próximo domingo, en efecto, no está dentro de los planes del Comandante. Después de todo, aunque su rival haya logrado unir a la oposición y en su cierre de campaña del domingo pasado, convocado a más de un millón en Caracas, el líder bolivariano sigue siendo el Hombre Fuerte en Venezuela.
Cierto. El candidato opositor Henrique Capriles, un abogado de 40 años, superó por primera vez a Chávez en intención de voto, según la más reciente encuesta de Consultores 21. En agosto pasado, Capriles se ubicó en 47.7%, mientras que Chávez bajó a 45.9%, de acuerdo con la misma fuente.
Sin embargo, la brecha de 1.8 puntos está dentro del margen de error del estudio, de alrededor de 3.2 puntos porcentuales. Las cifras, que no han sido reveladas públicamente en Venezuela, fueron confirmadas el viernes pasado por Consultores 21.
En tanto, Chávez sigue al frente en la mayoría de las encuestas de firmas privadas. Pero la verdad es que la diferencia entre ambos difiere sustancialmente entre una encuesta y otra, mientras los dos equipos recorren el país intentando aniquilar la base de apoyo del contrario en la última semana de campaña.
Y el ambiente es tenso en Venezuela, cuentan los corresponsales extranjeros que han salido en estampida a cubrir lo que la mayoría opina podría ser el fin de los 14 años de hegemonía chavista en el país suramericano.
Pero, ojo, Chávez sigue siendo enormemente popular entre las clases pobres y los sectores rurales. Ahí están sus trincheras más leales. Y ahí aparece su rostro en cada motocicleta, coche, árbol y muro disponible.
Además de haber cultivado lealtades en el mejor estilo populista, el Comandante de 58 años cuenta con una serie de trucos incorporados al sistema para frenar una posible victoria de la oposición. Cuatro de los cinco escaños en la junta electoral los tienen sus incondicionales, por ejemplo.
Lo que sí está claro es que, si pierden, las elecciones del próximo domingo no son el fin de la guerra de la oposición. Es apenas su primera batalla como un solo puño y con un buen candidato.
No hay que olvidar que Chávez está enfermo. De ahí que surge otra pregunta: ¿Qué pasaría en una Venezuela chavista sin Chávez?