miércoles, marzo 29, 2006

El baile y el mito griego, para sanar a la pareja




El baile y el mito griego, para sanar a la pareja

Por María Lourdes Pallais.

México, 29 Mar (Notimex).- Lo femenino no es necesariamente débil, ni lo masculino, dominante. Ambas son "percepciones distorsionadas" que han impulsado "los excesos del feminismo" y dañan las relaciones de pareja, en opinión de Sven Doehner, director del Instituto de Psicología Profunda.

Lo que a estas alturas del siglo XXI parecería ser una verdad de Perogrullo, son "actitudes trilladas y artificiales que adoptamos todos los días; percepciones distorsionadas que nos impiden relacionarnos de manera saludable", opina el experto que imparte unos talleres que buscan mejorar la calidad de vida de las parejas.

Incluso, "hay mujeres que para desarrollar su lado masculino creen que tienen que pelearse mucho, parecer hombres y terminan traicionando su feminidad para competir y destacar en un mundo de hombres", alerta el especialista junguiano para quien la terapia no está restringida a un sillón.

Hay otro grupo de mujeres "que no le interesa estar en contra del hombre ni competir con él, sino relacionarse de manera saludable", y son ellas las que más se benefician de las dinámicas de sus terapias "vivenciales", agrega el experto.

Sus talleres, como "Energías Masculinas y Femeninas", y "Explorando la Relación de Pareja por medio del Baile", han ayudado a cientos de parejas en México a mejorar su relación mediante actividades cotidianas, como el baile, y representaciones de clásicos mitos griegos que reflejan la universalidad de las relaciones humanas.

"Mi idea es facilitar a hombres y mujeres las herramientas para canalizar sus energías, sus principios, sin darles un sermón ni una terapia de sillón", expresa el especialista para quien, como buen discípulo de Carl Jung, la meta terapéutica era hacer consciente lo inconsciente.

Uno de los vehículos que utiliza en sus talleres es la representación de las cuatro relaciones de pareja en la mitología griega que reflejan patrones universales.

Por ejemplo, la relación entre Afrodita y Hades: "Qué interesante, la Diosa del Amor casada con el Dios de la Guerra," reflexiona. Para él, esa relación entre la guerra y el amor "habla mucho de que la relación de pareja no es estar siempre bien" sino encuentros y desencuentros, hasta lograr un buen equilibrio.

Sus talleres, que duran un fin de semana "en un lugar de retiro", cuestan cuatro mil pesos e incluyen a un total de 30 personas, integran teoría y práctica asegurando la participación del paciente al plantear, por ejemplo, "el nacimiento de Afrodita, el origen de Hades" en una representación teatral.

La primera noche, ante los pacientes reunidos, el experto, que tiene un doctorado en psicología clínica de la Universidad de Newport en California, hace una "escena y hablo de Hades" y luego su "pareja de trabajo", hace lo propio con Afrodita.

"Al contar la historia es imposible que los participantes no se proyecten y en vez de discutir el tema, dejamos a todos enganchados que se vayan a dormir. Y es impresionante como al día siguiente, los sueños reflejan el aspecto inconsciente de los participantes ante el gancho de la historia".

Así, el paciente descubre poco a poco "su lado masculino y su lado femenino y deja de caer en los prejuicios de que el hombre es macho y la mujer es pura percepción", asegura Sven, quien exploró prácticas terapéuticas con curanderos mayas, zapotecos y mixtecos en el sur de México.

Otro taller que parece tener muchos seguidores en nuestro país es el relacionado con el baile y la pareja.

"El baile es una de las actividades que más refleja lo que ocurre realmente entre una pareja. Y el baile y la relación amorosa comparten elementos que son tan cotidianos que la mayor parte de las veces pasan desapercibidos", en su opinión.

"Durante el baile, se puede observar con claridad las personalidades del hombre y de la mujer y rápidamente se establece hasta qué punto hay distancia o unión entre la pareja".

El taller, dirigido por el propio terapeuta y el maestro de salsa Julio César Rubio, inicia con una plática entre las parejas -"no son más de 15 porque así se puede trabajar estrechamente con ellas"- quienes hablan tanto de sus gustos y deseos como de sus problemas.

Luego el maestro de baile les pone unos pasos básicos de algún ritmo. Algunas parejas los repiten rápidamente. Otras tardan en agarrar el ritmo. Son 30 minutos de baile. Cuarenta de receso, donde las parejas platican entre ellas, con otras parejas o con el terapeuta. "Ahí surgen los reclamos: me pisaste, perdiste el ritmo, vas muy rápido o muy despacio", cuenta Sven.

Pero en realidad, al bailar, los problemas surgen solos. "No se necesitan palabras. En el baile, el lenguaje corporal lo dice todo", concluye el especialista en psicología analítica del Instituto Jung de Boston, en Estados Unidos.

Recupera poeta rusa interés de Octavio Paz por verso japonés





Recupera poeta rusa interés de Octavio Paz por verso japonés

México, 29 Mar (Notimex).- Octavio Paz fue uno de los primeros autores en América Latina que difundió la escritura de "Haikus", versos cortos basados en muestras de colores sin rima ni versificación acentual, reconocidos como la forma literaria más bella en Japón.

Fue en 1957 cuando Paz tradujo Oku no Hosomichi, un diario de viaje del japonés Matsuo Basho en "Haikus", de poesía no sólo escrita -o, más bien, dibujada- sino vivida, en palabras del Nobel.

La publicación fue recibida en México con "la extrañeza" y "la indiferencia" propia de "la primera impresión que produce cualquier contacto", con la cultura japonesa, según una cita del escritor publicada en un ensayo que narra su interés por esa forma de literatura oriental.

Desde entonces, la cantidad de traducciones de la obra de Basho ilustra la afición de los escritores occidentales por el Oriente, de acuerdo con la misma fuente, El signo y el garabato (Joaquín Mortiz, 1986).

Paz no ha sido el único poeta hispanoamericano que escribió "Haikus". También lo hicieron Jorge Luis Borges y Mario Benedetti,

Antes, escritores como Ezra Pound, Yeats y Paul Claudel ya habían experimentado con esa manera de acercarse a la cultura japonesa.

Hoy, poetas menos conocidos, como Elena Rounova, originaria de Yaroslalv, al noroeste de Moscú y afincada en Nicaragua desde 1987, recuperan ese estilo clásico japonés compuesto de cinco versos divididos en dos estrofas, una de tres líneas y otra de dos.

En días pasados, la poeta rusa ganó un concurso en el país centroamericano por sus 121 "Haikus", escritos como flashes que iluminan un instante, como pensamientos que se encadenan con percepciones de nostalgia, humor e incluso religiosos, procedentes de la sabiduría del zen.

La obra de Rounva (ahora Helena Ramos) tiene como eje "la percepción del color, y los colores como reflejos de estados anímicos, psicológicos y eróticos", de acuerdo al fallo del IV Concurso de Poesía Mariana Sansón 2006 convocado por la Asociación Nicaragüense de Escritoras.

Como "estrellas tintineantes" y "minúsculas pinceladas verbales" el poemario Policromos -como se llaman los lápices de color para pintores--, "traspasa la frontera entre lo efímero y lo eterno", en opinión del jurado.

A continuación, reproducimos extractos de los Haikus de la poeta rusa sobre el color blanco, la "síntesis de todos los colores". El primero se refiere "al gozo y la ansiedad ante una página blanca, lista para que escriba en ella", en palabras de la escritora: Blanca la noche/ mis soledumbres blancas/ blanco el papel.

En el segundo, "una muerte tiñe con su presencia la blancura de las sábanas, trastoca la limpieza y la armonía de una cama limpia": Una muchacha/ tiñó con su muerte/ las sábanas blancas.

"La blancura del gato es placentera, ellos duermen muy sabroso": Mi gato duerme/ en una fuente marrón/ ­Qué blanco luce!

"Y los cerezos alisos, muy frecuentes en Rusia, florecen en mayo, significan para mí la cercanía del verano y de las vacaciones que pasaba en el campo; era una premonición de las aventuras, los encuentros, una ansiedad más bien agradable": Todo arde en el blanco/ fragante frescor/ de los cerezos.

El poemario está dedicado a Sor Juana Inés de la Cruz, Frida Kahlo, Remedios Varo y Gabriela Mistral, entre otras.

Cumplen las mujeres hasta en 96% el pago de sus créditos




Cumplen las mujeres hasta en 96% el pago de sus créditos

Por María Lourdes Pallais

México, 29 Mar (Notimex).- Concepción Santiago Palma tomó el control de la fábrica de focos de camiones de su marido cuando éste abandonó el negocio. Con la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio, la competencia aumentó y ella sólo tenía un molde. Solicitó un crédito y se separó de su marido.

Desde hace 2004, Concepción, de 60 años, es dueña y señora de una pujante fábrica de focos de camiones en la Ciudad de México. Aceptó a su marido de regreso, pero no para controlar el negocio.

Cuando el esposo de Silvia González Cuevas emigró a Estados Unidos llevándose el coche y el tractor que la pareja tenía para trabajar la tierra en un rancho de Guanajuato, ella decidió no echarse a llorar. Se organizó y descubrió "las redes truculentas" que le permitieron armar su propia aseguradora de cosecha.

Hoy, tras formar con éxito una asociación en su gremio, Silvia se convirtió en la primera mujer aseguradora de cosecha en México. Cuando su marido regresó, la encontró con coche y tractor nuevos.

Vero, una artesana "talentosísima" empezó su negocio con apenas 80 pesos. Solicitó un crédito y empezó a trabajar. Ahora, sus artesanías se venden como pan caliente en la cadena de tiendas Liverpool.

Son tres de 40 mil mujeres mexicanas de 26 estados que han logrado sacar adelante un negocio y ahora forman parte de una organización que busca capacitarlas en las tareas de contabilidad y administración de sus empresas, así como generar enlaces comerciales entre ellas mismas y solicitar créditos.

Así lo cuenta Rosanna Teruggi Pereda ("Rosca"), la coordinadora nacional de Renaces, la Red Nacional de Mujeres Productoras y Empresarias Sociales, quien viaja por el país desde hace nueve meses para recordarles la importancia del "trabajo en conjunto".

Por sus tradiciones y cultura, las mujeres que integran la red "nunca pensaron que iban a tener la oportunidad de tener su propio negocio" pero muchas se vieron obligadas ante el aumento de la migración de sus compañeros, en opinión de Rosanna.

"La migración de sus esposos detonó el fenómeno: o salían a la calle a poner su propio negocio o sus hijos no tenían qué comer", asegura la promotora. "Y este espíritu de sí se puede se ha ido contagiando aún entre mujeres cuyos maridos no dejaron el país".

Por otro lado, no todas, pero muchas mujeres de Renaces, especialmente las que trabajan en el campo, han sido víctimas de violencia intrafamiliar, informa la emprendedora.

Rosanna comparte con Notimex una anécdota que refleja la gravedad de esta situación:

"Un día se me acercó una señora y me dijo quiero detonar la red en mi estado porque mis papás me abandonaron cuando nací, mi esposo me dejó por mi mejor amiga y fui violada. Me tocaba guardarme en un cuartito y dejarme morir pero descubrí que existía la opción de salir adelante. Lo que quiero es que otras mujeres descubran que existe esa opción".

En los últimos tres años, los programas a favor de la mujer productora empezaron a proliferar en México a raíz de una política de apoyo que surgió desde el nivel municipal hasta el federal, al margen de los partidos políticos, en palabras de "Rosca".

En el año dos mil, de su presupuesto de mil millones de pesos anuales Fonaes, por ejemplo, un órgano de la Secretaría de Economía de apoyo a productores indígenas y campesinos, sólo otorgaba 4% de crédito a la mujer. En 2005, esa cifra aumentó a más de 40%.

En Zacatecas, la actual gobernadora Amalia García, del PRD, creó un programa de crédito que privilegia a las mujeres. En Michoacán, el también perredista Lázaro Cárdenas creó otro programa de pequeños créditos para las féminas.

En cada estado, las mujeres productoras tienen su forma "muy particular" de trabajar, abunda la joven promotora.

"En Tlaxcala trabajan mucho por grupos de hermanas. En San Luis Potosí, por familias. En Michoacán y Zacatecas, generalmente la mujer trabaja sola por el alto nivel de migración. En Baja California Sur, apenas empieza a despertar".

En el Distrito Federal, Renaces apoya a un grupo de tres mil vendedoras ambulantes del Centro Histórico, que no forman parte de la red porque pertenecen a la economía informal.

Las mujeres de este grupo vienen de muchos estados, son víctimas de "mucha drogadicción y prostitución", pero se están organizando para formar una asociación civil, y Renaces les dará asesoría legal, fiscal, psicológica y le ayudará a instalar una guardería. "Quieren entrar a la economía formal".

Antes de fines de siglo, las féminas en México "no tenían oportunidad de acceder a ningún crédito" hasta que "los bancos, y a todos los niveles de gobierno, se empezaron a dar cuenta que cuando se le otorgaba un crédito a una mujer el porcentaje de pago es de alrededor del 96%", concluye la promotora social.