jueves, noviembre 10, 2005

"Una llamarada de petate": El voto de los mexicanos en Estados Unidos

Carlos Olamendi, un mexicano que reside en Santa Ana, California desde hace décadas y ahora integra la Coalición por los Derechos Humanos de los mexicanos en el extranjero, asegura que la campaña del Instituto Federal Electoral (IFE) para promover el voto de sus paisanos es “una llamarada de petate.”

“No ha llegado donde como una barbacoa de Hidalgo los domingos, donde voy para mandar mi dinero a México, donde compro mi ropa, mi despensa, mis periódicos, a esos círculos donde nos reunimos los migrantes en Estados Unidos,” asegura el empresario.

“Sólo está en los consulados, donde el mexicano invariablemente prefiere no ir porque dice ´ahí va a ver cola y además tengo que pagar ocho dólares con 50 centavos para enviar mi registro, ¡ay cabrón!´,” agrega.

La ausencia del IFE en esos lugares durante esta primera etapa que culmina en diciembre indica que su campaña “es una llamarada de petate,” porque “no existe una difusión masiva en nuestras comunidades para que los mexicanos puedan votar en esta elección.”

El IFE debería tener en cuenta los gustos y las características de por lo menos el 10 por ciento de los 4.2 millones de mexicanos con credenciales de elector en Estados Unidos, en estos meses cruciales para registrarse e integrar un padrón electoral “sólido y fuerte.”

Pero el instituto electoral no está de brazos cruzados.

Acaba de contratar a Los Tigres del Norte, la popular banda musical que dio fama a una serie de canciones de arraigo popular, para que a través de conciertos en las principales plazas de Estados Unidos, se promueva el voto. La inversión será de 15 millones de pesos.

Además, propuso que las plataformas políticas de los diferentes partidos que participarán en los comicios del 2006 sean incluídas en los documentos que entregará a los mexicanos votantes en el extranjero y que se organicen debates transmitidos en Estados Unidos sobre migración.

“Son dos propuestas nuestras para apoyar en la toma de decisión del votante, ya que el IFE está consciente de que la misión no es sencilla y está trabajando contra el reloj,” dijo la vocera del organismo electoral, Pilar Alvarez Laso.

Para Olamendi, antes de que los mexicanos en Estados Unidos conozcan las plataformas políticas de los candidatos presidenciales para las elecciones del 2006, es imprescindible que el IFE “aumente el presupuesto que tiene hasta diciembre.”

“No debe de escatimarse ni un segundo, ni un momento, ni un centavo en la promoción del voto de los mexicanos para que puedan inscribirse en el padrón electoral”, afirma.

El presupuesto del IFE para promover la campaña de registro de votantes en el extranjero es de 400 millones de pesos hasta diciembre de este año. Pero la iniciativa aprobada para permitir el voto de los mexicanos en el extranjero incluye artículos transitorios que permiten al IFE solicitar más presupuesto para la misma.